El Proceso Creativo de Jairo Llano: Fotografías que Capturan la Escultura y el Tiempo
Desde hace un tiempo tengo conversaciones con la inteligencia artificial, buscando en ella el reflejo de lo que soy al preguntarle de manera forzada por mi mismo y por mi trabajo. En estos días trabajé con ella para crear una entrevista que me permitiera entenderme para compartir con otros mi proceso artístico.
Está fue la entrevista que me hizo el Agente de lenguaje, las respuestas son mías, libres y sin pretenciones, les dejo este aparte para construir juntos el imaginario de Jairo LLANO.

Pregunta 1: ¿Cómo describirías tu trabajo y tu proceso artístico en este momento de tu carrera?
JL: Trabajo desde la fotografía. Últimamente me obsesiona el tiempo, eso que se nos va de las manos sin poderlo controlar; el tiempo que invierto en hacer cosas, el tiempo que capturo en una fotografía de esculturas temporales de papel, ese punto intermedio entre lo que hay y lo que falta.
Pregunta 2: ¿Cómo te ha influido la evolución de la tecnología en tu práctica artística?
JL: Se ha mantenido constante la fotografía de lo cotidiano, de cosas que están a mi alrededor, ya sea elementos esculturales en la arquitectura o elementos efímeros en la arquitectura como las entradas de sol en un espacio, hasta la captura de mi más reciente obra, que son esculturas de papel que se desvanecerían de no ser por la captura fotográfica. He cambiado de escala, pasando del paisaje y la arquitectura hacia los objetos y los elementos que puedo controlar en un taller de artista. He pasado de la cámara al celular para hacer mis registros, dejando la técnica publicitaria para hacer más evidente la pulsión emotiva al hacer una obra y tomar el registro con aquello que tengo disponible cuando creo una obra.
Por otro lado, siempre ha estado presente el lenguaje, las palabras, frases y poesía, pero hasta ahora no lo incluía en mi obra. Creo que hoy siento que esas frases deberían incluirse dentro del cuerpo de trabajo del artista que piensa, reflexiona, sobrepiensa y filosofa de muchas cosas a su alrededor.
Pregunta 3: ¿Qué importancia tiene la reflexión filosófica en tu obra?
JL: Es lo más importante. Aunque intento crear de manera más libre, siempre es una reflexión la que inicia un proyecto. Por ejemplo, en Loading Pixels (https://www.jairoallano.com/loadingpixels) tenía una pregunta sobre qué es la fotografía en la era digital y qué significaba cortar el tiempo en medio de un lenguaje computacional. Luego, la reflexión da pie a las series con las que intento crear muchas variaciones sobre un mismo tema para poder coleccionar ejercicios estéticos que van anclados a la reflexión filosófica. Creo en el mundo de la imagen como metáforas de la realidad.
Pregunta 4: ¿Por qué elegiste la fotografía como medio para tu trabajo artístico?
JL: Elegí la fotografía por un amor a ella, porque pareciera ser ese espacio conceptual donde guardas las cosas que se pierden, su carácter de archivo, su vínculo con los demás, y porque pareciera ser instantánea. Esencial es el tiempo y la luz, pero también los objetos fotografiados, el paisaje, la arquitectura, los objetos que me rodean en mi taller, papeles que colecciono, libros viejos, diccionarios o mapas, así como tazas de café olvidadas por días en mi estudio o elementos de la naturaleza que encuentro en el suelo, flores caídas y húmedas, ramas secas, flores secas, etc.
Pregunta 5: ¿Qué otros artistas han influido en tu trabajo y cómo?
JL: Hace unos años vi una exposición sobre Zoe Leonard en el Museo Reina Sofía. Me conecté mucho con sus series sobre Nueva York, especialmente la de las rejas que encapsulan los árboles. Me encanta también la escultura de Tara Donovan y las series de fotografía de Taryn Simon.
En mis estudios en el Master de fotografía de la UPV (Universidad Politécnica de Valencia) fue muy fuerte la influencia de la escuela de Düsseldorf de fotografía, y en arquitectura me gusta el peso visual de Barragán, así como la poética de los edificios de Álvaro Siza.
Creo que desde mi juventud, la presencia de Duchamp fue un golpe de luz que cambió mi forma de ver el mundo y entenderlo, y en ese tiempo pensaba en el collage como un lugar objetivo. Me interesa el museo por las repercusiones que tiene, por la caja blanca, pero también por el aura religiosa de sus espacios, espacios para el encuentro personal.
Pregunta 6: ¿Cómo ves la relación de tu trabajo con el contexto artístico actual?
JL: Pff, eso se me hace mucho más difícil. Mientras veo un gran movimiento artístico local que habla de política y sociedad, creo que mi trabajo es muy personal, como laberíntico en mi propio yo.
De hecho, hacer fotos de esculturas temporales es un ejercicio que creo que no tiene nombre, pues, siendo fotografía contemporánea, no se sabe si es el registro de una obra que es la escultura o si es la escultura misma inmortalizada... es un lugar muy intermedio. Veo al arte contemporáneo ser más electrónico, más beligerante, y sé que esa no es la posición de mi trabajo.
Pregunta 7: ¿Qué es lo más importante que quieres que los curadores entiendan sobre tu trabajo?
JL: Es un trabajo conceptual que conecta puntos personales y que representa metáforas sobre mi identidad en el mundo que me rodea, que tiene miedo y que puede querer ser descubierto, como si el curador y el espectador se tuvieran que interesar para encontrar el corazón de la obra y conectarse íntimamente con él.
Pregunta 8: ¿Qué metas o nuevos desafíos quieres asumir dentro de tu práctica artística?
JL: Quisiera encontrar un camino hacia la escultura pública. Temporal o permanente, me parece que poder romper las barreras del estudio, el computador, las redes sociales y la galería puede permitirme pensar en voz alta, por decirlo así, gritar al mundo de manera artística aquello que no se comunica con palabras, sino con la estética del arte. Permitiendo unir arquitectura, arte, filosofía y reflexiones, probablemente en un ejercicio menos solo, con un equipo de otras personas con quienes podamos articular nuestras ideas.
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